Cuándo TLC llegó a nuestras vidas estábamos pasando por una situación familiar muy difícil. Después de quebrar muchas veces en negocios tradicionales y de intentar salir adelante, montamos un local de fiestas en la casa de mis padres, en el negocio nos fué bien, pero después de 7 años de trabajo Cintia, mi esposa quedó embarazada de nuestra segunda hija, Johana, quién vino a éste mundo con muchas complicaciones a consecuencia de las largas trasnochadas y el humo tóxico de los cigarrillos, Johana vivió 9 meses y sus últimos 4 meses de vida, pasamos en un hospital público, y eso fue el motivo principal del porqué buscamos otra opción de ingreso.
Conocimos a Sara González y Derlis Ramoa en un negocio anterior pero cuando nos mostraron el plan de TLC no dudamos un segundo para sumarnos al proyecto. Gracias a esa decisión hoy después de cuatro años llegamos a Director Global, podemos decir que nuestro estilo de vida cambió totalmente, nuestra Salud mejoró, nuestro tiempo de calidad con la familia mejoró y nuestra economía mejoró. Compartimos con el movimiento A3VTé el compromiso con la visión de liberar 1000 familias, es hoy nuestra misión de vida, porque gracias a TLC y el Movimiento A3VTé hoy podemos decir que somos libres.